¿Sabías que la heladera puede representar hasta el 30% del consumo eléctrico de tu hogar?
Por ser un electrodoméstico de uso constante, cuidar cómo la usás puede marcar una gran diferencia en tu factura y en el consumo colectivo de energía.

Desde CLEMiC, te dejamos estos consejos para que tu frío sea más inteligente y responsable 👇
✅ Lo que sí suma:
- ⚡ Dejá que los alimentos se enfríen antes de guardarlos: el calor exige más energía para enfriar.
- 🚪 Abrí solo lo necesario: cada apertura puede representar entre un 5% y un 10% del consumo.
- 🌡️ Ajustá el termostato: cada grado de más enfría de más… y consume de más (+5% por grado).
- 🧼 Limpiá la parte trasera al menos una vez al año para mejorar el rendimiento.
- 🔍 Revisá los burletes de las puertas: si están dañados, se escapa el frío.
- ↔️ Dejá unos 15 cm de espacio con las paredes para que ventile bien.
- 🌬️ Ubicala en un lugar fresco y ventilado, lejos del horno o el sol directo.
- ❄️ Descongelá con regularidad: el hielo actúa como aislante y dificulta el enfriamiento.
⚠️ Lo que conviene evitar:
- 🌡️ Enfriar más de lo necesario. Más frío = más consumo.
- 🧊 Usar funciones como dispensadores de agua o fabricadores de hielo si no son esenciales.
- 📏 Comprar una heladera más grande de lo que necesitás. ¡Elegí según tu consumo real!
💡 Dato clave: La etiqueta de eficiencia energética es tu mejor aliada.
Elegí clase A o superior y podés ahorrar hasta un 50% de energía respecto a modelos más antiguos.
📣 En CLEMiC creemos que cuidar la energía es una tarea de todos, y empieza en casa.